Si acabas de tener un bebé y has decido incluir los biberones en su alimentación, seguramente tengas muchas dudas sobre cómo preparar un biberón para un recién nacido. Cómo calentarlo, cuál es la mejor forma de esterilizarlo o cuántas veces se le tiene que dar el biberón son algunas de las dudas que te resolveremos hoy en el blog de AdaBaby.
Limpieza y esterilización
Empezamos por una parte fundamental a la hora de darle el biberón a tu bebé y es la limpieza y esterilización de los biberones. Los recién nacidos tienen un sistema inmune frágil y, por eso, hay procurar eliminar todo tipo de bacterias que puedan provocar que nuestro bebé se ponga enfermo.
Antes de ponerte a manipular el biberón de tu bebé, debes lavarte las manos con agua y jabón. Una vez termines, sécalas bien con un paño limpio. A continuación, lava a conciencia con agua jabonosa todos los utensilios que vayas a utilizar para preparar el biberón tales como las tetinas, el biberón, el cacito o cuchara de la leche… Incluso algunos médicos recomiendan limpiar, enjuagar y secar cuidadosamente la tapa de los envases de la leche.
Una vez termines con la limpieza, puedes esterilizar los biberones para una mayor eliminación de bacterias. Para hacerlo, puedes utilizar esterilizadores independientes como el de Jane, con capacidad para 6 biberones. U otros como el esterilizador para microondas de Chicco que elimina el 99,9% de las bacterias en solamente 3 minutos.
Consejos previos para preparar un biberón de forma correcta
Cada fabricante tiene unas medidas y unas cantidades distintas, léelas previamente y sigue las instrucciones que te indiquen para preparar el biberón. No obstante, hay algunos consejos básicos que debes considerar a la hora de preparar el biberón para tu bebé:
- Prepara el biberón en cada toma y no lo hagas todo de golpe. Es preferible que prepares el biberón del bebé en el momento, sin embargo, puede darse la ocasión de que necesites llevarlas preparadas de casa, es ese caso, utiliza una nevera para garantizar su correcta conservación.
- Es posible que, pese a seguir las indicaciones médico en cuanto a cantidades y tomas, tu bebé no quiera más. En este caso, no reutilices la leche ni para una toma posterior, ni mucho menos para el día siguiente. La leche sobrante debe desecharse.
- Una vez prepares el biberón, no debes guardarlo en termos ni en calentadores. Si vas a llevarte la toma fuera, es preferible que lleves un calentador de biberones portátil y, cuando sea el momento de la toma, calientes el biberón.
Cómo preparar un biberón de forma correcta
- Lava bien tus manos antes de manipular el biberón de tu bebé. Una vez lo hagas, revisa si está todo limpio o si es preferible que cambies el biberón por uno 100% limpio.
- Llena el biberón con agua. Si el agua de tu localidad es apta para el consumo humano, puedes utilizarla. De lo contrario, utiliza agua embotellada. Una vez tengas lleno de agua tu biberón, hiérvela durante al menos dos minutos.
- Añade los cacitos de leche correspondientes en su justa medida. No presiones el cazo para que quepa más leche, ni pongas más agua o leche de la indicada por el fabricante y por tu pediatra. En caso de exceso de leche, puedes provocarle problemas digestivos al bebé. Y si nos pasamos con el agua, puede que no reciba los nutrientes necesarios al tomarse la toma entera.
- Cuando ya tengas el agua y la leche necesaria, agita bien el biberón para que integre todo y no queden partes sin disolver.
- Cuando ya lo tengas todo bien integrado, calienta el biberón al baño María o en un calienta biberones.
- Por último, vierte unas gotitas de leche sobre tu muñeca para comprobar que la leche está a la temperatura correcta, que debería oscilar entre los 36 o 37 grados.
Estos son algunos de los consejos sobre cómo preparar un biberón para un recién nacido. Encuentra en AdaBaby todo el material que necesitas para calentar y esterilizar los biberones para tu bebé, además de otras muchas cosas de bebés y mobiliario infantil.